37. Un camino difícil
Marie compró una entrada para la última función del circo en la ciudad. Podría haberse ahorrado el dinero, unos días antes formaba parte de la compañía circense. Era la trapecista estrella. Pero esa tarde, Marie prefirió la discreción, solo quería despedirse de François. Él había decidido continuar la gira, ella quedarse y establecer allí su residencia.
A las seis apagaron las luces, quedaron dos trapecios iluminados sobre el escenario. Sonó la música, en un trapecio subía François y en otro Juliette, una joven acróbata con gran parecido a Marie. Quizás por eso, Marie sintió náuseas al verla. La figura de Juliette era perfecta. Marie se vio a sí misma junto a François llenando el espacio, moviéndose al unísono, conectando con el escenario, con el trapecio, con el público que aplaude cuando François recibe a Juliette en su trapecio. Ahora, Marie siente un pinchazo en el vientre. Los ve impulsándose, dejándose caer, sus piernas meciéndose entrelazadas. Más impulsos. Más balanceos. Más aplausos. Marie siente un mareo, se levanta y, tambaleándose, busca la salida.
Ya fuera, Marie creyó precipitarse al vacío. Inspiró. Luego, soltó el aire lentamente mientras se alejaba del circo con una nueva vida en sus entrañas.
No conocemos la relación previa entre Marie y François, pero alguna hubo, de cierta intensidad y con consecuencias no menores, que le van a impedir seguir con su trabajo durante un tiempo al menos; a partir de ahora tendrá que hacer otro tipo de acrobacias para sacar adelante, sola, a una criatura.
Puede que François no sepa nada o puede que no lo quiera saber, pero la dignidad del personaje para seguir adelante pese a todo es digna de admiración. Algunas veces las verdaderas estrellas son engañosas, pues prefieren quedarse más cerca del suelo y parece que brillan menos.
Un relato lleno de sentimientos contenidos, en un momento de cruce en el que los caminos de disgregan.
Un abrazo y suerte, Aurora
Ángel, agradezco tu lectura, siempre atenta. Tienes razón, a la protagonista ahora le esperan otro tipo de acrobacias, muy difíciles también. Me ha gustado eso que dices de que a veces las verdaderas estrellas son engañosas y se quedan cerca del suelo y parece que brillan menos, muchas veces las tenemos cerca y ni las vemos…
Abrazo
La tensión se palpa, parece que va a ocurrir alguna tragedia y casi con esas punzadas en el vientre, pero seguro que todo sale adelante. Bonitas imágenes y tensas en el trapecio. Suerte
Manuel, muchísimas gracias por tu comentario, me hubiera gustado alargar más la tensión pero las doscientas palabras de tope me lo impedían jajaja
Sí, su «tragedia» en ese preciso instante, por nombrarlo de alguna forma, sería el tener que dejar el circo. Aunque le espera algo muy bueno al final de su nuevo camino.
Abrazo
Precioso relato lleno de sentimientos escondodos, relaciones intuídas y futuros inciertos, hermosos y duris. Un abrazo
Precioso relato lleno de sentimientos escondidos, relaciones intuídas y futuros inciertos, hermosos y duros. Un abrazo
Me ha encantado, Aurora. Mucha suerte con tu relato.
Isabel, qué bien recibir tu comentario, te lo agradezco sinceramente.
Abrazo
JUAN, bien cierto que la existencia es un circo de cinco pistas, a veces incluso más, diría yo.
Lola, así se llamaba Gina Lollobrigida en Trapecio y desde luego que en esa peli estaba en sus mejores momentos. Noventa y cinco años que vivió la mujer, no sé yo si estaría en el mismo circo de cinco pistas que nosotros o en uno más facilón jajaja
Me gusta como has descrito la maternidad, excelente definición, y me alegra tu lectura y comentario.
Abrazo
Magnífico texto, Aurora. Has dibujado un escenario lleno de imágenes potentes y emotivas. Te felicito porque lo has bordado.
Un fuerte abrazo
Lleno de vértigos, jajaja
Muchas gracias por tu lectura, Javier
Espero tu texto pronto
Abrazo
Aurora, se describe mucho en pocas líneas .Me ha gustado mucho¡¡
Parece claro que su relación no significó lo mismo para François y Marie…
saludos
Igor, eso es para François una cosa y para Marie otra bien distinta. Muchas gracias por tus palabras. Nos leemos
Hola Aurora
Ambos sendos los dos sabemos que ha sido un camino difícil, pero Marie acierta al elegir quedarse. Un micro de altos vuelos muy poético. Me gustó como quedó. Mucha Suerte y a ver si sale elegido.
Saludos!
Complicado y con más vueltas que el centrifugado de mil cuatrocientas revoluciones, seguro que te lo imaginas jajaja
Muchas gracias por tu lectura, Javier
Abrazo