43. CIDE HAMETE BENENGELI
Reunido este Tribunal de la República de las Letras, a petición de Alonso Quijano, para deshacer el entuerto sobre la autoría de la novela El ingenioso hidalgo don Quijote de la Macha, tras las deliberaciones realizadas conforme a los plazos que establece la ley,
ACUERDA
desestimar los pleitos que presentaron el poeta simbolista Pierre Menard, francés, afincado en Argentina, por posible plagio; y el licenciado Alonso Fernández de Avellaneda (seudónimo), natural de la villa de Tordesillas, por flagrante fraude,
respetar al novelista, poeta, dramaturgo y soldado Miguel de Cervantes Saavedra, nacido en Alcalá de Henares, su papel como cronista respecto al autor anónimo de los capítulos I a VIII del libro que se juzga, y
atender las alegaciones del historiador arábigo Cide Hamete Benengeli, manchego, y declararlo, sin menoscabo del apartado precedente, autor único de la obra citada, cuyo manuscrito en árabe hemos podido autentificar.
Es decisión del Tribunal, tras la firma de este Decreto, que la novela recupere su título original, Historia de Don Quijote de la Mancha, y que el nombre de Miguel de Cervantes sea sustituido en todas las ediciones, incluso con efecto retroactivo, por el de Cide Hamete Benengeli.
Vaya final, realmente sorprende, cuando ya deberíamos estar acostumbrados a que cuando algo tiene éxito le salgan muchos padres, y a que algunas decisiones de tribunales estén lejos de eso que llamamos «justicia».
Un relato muy bien documentado, y una historia posible.
Un abrazo y suerte, Rafa (acabo de poner lo mismo a otro Rafa, qué cosas)
Muchas gracias por tu juicio (hablando de tribunales, claro…), Ángel.
Y los Rafas, ya ves, parece que nos multiplicamos.
Otro abrazo de vuelta para ti.
Triple tirabuzón de metaliteratura de altura. No sé si por el vértigo o la ignorancia, pero no me atrevo a lanzarme.
Atrévete, Edita. Seguro que solo es vértigo, y una vez que te lances a lo mejor te sorprende lo gratificante que resulta.
Y muchas gracias por pasarte por aquí y comentar.
Un abrazo.
Pues no recordaba yo al tal Cide Hamete Benengeli, pero por suerte existe el señor Google para refrescar conocimientos. Gracias por traerlo y enhorabuena por tu micro.
Un abrazo y suerte.
A mí, Cide Hamete Benengeli siempre me hace pensar en lo socarrón que podía llegar a ser Cervantes.
Muchas gracias por tu comentario, Rosalía, y otro abrazo de vuelta.
Muy ingeniosa y laboriosa tu propuesta, Rafael. Casualmente, he oído estos días un podcast en el que algunos estudiosos del tema hablan de que Cide Amete Berengueli es un anagrama inexacto de Miguel de Cervantes, genial ocurrencia del autor para esconderse tras el nombre. Inexacto, porque el nombre del supuesto historiador arábigo se compone de 19 letras y el del alcalaíno de 17, habiéndose repetido una «e» y una «i» en el nombre ficticio. A mí, que me privan los juegos de palabras, me ha parecido todo un hallazgo. Igual me he enrollado de mala manera y ya eras conocedor del tema, habiendo jugado en tu relato irónicamente al sentenciar a favor del autor arábigo siendo la misma persona que el célebre Cervantes. Sea como sea, enhorabuena y suerte con este micro tan bien armado. Un abrazo.
Perdón, me he fiado de mi mala memoria visual y he escrito Cide Amete Berengueli, siendo lo correcto Cide Hamete Berengeli, además la diferencia es de más letras de las que he nombrado. En la revista de filosofía «Sincronía» está todo muy detallado por si a alguien pudiera interesarle. Un saludo.
Hola, Rafael, después de ver cómo has contestado a Rosalía, ya tengo la respuesta. Es lo que tiene no leer a veces los comentarios atentamente.
Hola, Juana María.
Pues mira, te diré que del nombre de Cide Hamete Benengeli conozco varias teorías cervantinas de estudiosos que me encantan, por el juego que dan, pero precisamente esa del anagrama no la había oído nunca, y me parece genial. Casa muy bien con ese espíritu juguetón con que asocio a Cervantes cuando ideó todo ese complejo entramado de la autoría del Quijote. Muchas gracias por compartirlo. Lo buscaré en la revista que mencionas.
Y muchas gracias por tus comentarios.
Un abrazo y saludos.
“El Gogle” lo sabe too! Y gracias porque tú relato requiere conocimientos que no están en la calle, sino en los libros.
Muy bien llevado y traído.
Muchas gracias por tu comentario, Rosa.
Los juegos metaliterarios siempre me han encantado, así que di rienda suelta a este quijotesco en el micro.
¡Y a ver cuándo Google nos dice los números de la Primitiva!
Un abrazo para ti.