51. VIRTUDES Y NO VIRTUALES
Coleccionistas de ayer y hoy presentan… Coleccionistas del mundo uníos… mensajes, consignas para las personas que siguen con la costumbre de guardar, en la mayoría de los casos, objetos. Con los tiempos los hábitos también cambian y las nuevas generaciones son dadas a coleccionar menos, o en todo caso otro tipo de cosas y hasta virtuales.
Mi abuelo me regaló su colección de monedas y billetes cuando yo todavía era un chaval, que con el paso del tiempo he tratado de mantener y ampliar. Yo he encontrado también la horma de mi zapato con otro tipo de coleccionismo, o fetichismo, pero no me preocupa esta veneración excesiva porque lo que sigo guardando son las virtudes del amor y el respeto. Al menos eso intento, y no quedan muchos en este mundo loco que sigue venerando a ídolos de barro y virtuales, que son muy fáciles de romper afortunadamente pero que vuelven a aparecer como por arte de magia.
Mi hija recibirá una colección más grande de monedas y billetes, pero no habrá ninguna bitcoin como tampoco estampitas de divinidades, ni de héroes o villanos.
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Coleccionar es una afición que se ha dado a lo largo de todas las generaciones, de una manera o de otra. Las colecciones, cuando se basan en objetos, se pueden heredar, tener una continuidad, hacerse más grandes. Como las modas, varían con los años. Algunas se basan en objetos y otras quizá sean más virtuales. Hay algo que también se hereda: el ejemplo y las buenas virtudes, como las que nombras: el amor y el respeto. Por suerte, las virtudes también son hereditarias. De quien las transmite y de quien las recibe depende que permanezcan, de generación en generación..
Un abrazo, Antonio.
Espero que todo te vaya muy bien allá donde te encuentres.
Un abrazo
Gracias como siempre, es un gustazo leer tus comentarios. Pues por aquí desde donde estoy preocupado por lo que está pasando, deseando que pase rápido y que de esto aprendamos todos. Un gran abrazo, Antonio