28. De Color Rosa
Enmudeció el silencio. Las miradas trocaron en objetivos de cámaras fotográficas disparando sin cesar: ahora su sonrisa, luego su talle, y finalmente sus pies enfundados en altos tacones que descendían, para la estupefacción de los invitados a la gala, por los peldaños con una soltura y seguridad aplastante. Sin embargo, la admiración más abrumadora la consiguió el vaporoso vestido de cola rosa fucsia. Sus gasas aleteaban como mariposas mientras descendía por cada uno de aquellos escalones. Como una cascada de agua, la cola salpicaba brillos de los distintos matices del color rosa mientras se deslizaba por la ancha escalera. El armonioso porte había hipnotizado a los allí presentes
Un aplauso. Desconcierto. El presentador habló:
—Tengo el gran honor de presentar al ganador del “I Certamen literario de novela romántica De Color rosa”, el escritor Juan Torres Cid.
El desconcierto se mezcló con el silencio, todavía dueño del recinto.
—Por favor, les ruego un gran aplauso para el premiado… que se lo merece, no solo por su magnífica novela, también por el sorprendente efecto causado en todos ustedes… ¿Quizás porque el premio se lo lleva esta vez un hombre?, o, ¿por su acertado atuendo de gala?
Los aplausos espantaron al silencio.
Un relato escrito con coraje, que rompe tópicos, tabúes y etiquetas preconcébidas. La buena literatura no conoce edad, nacionalidad o sexo.
Un abrazo y suerte, Maite.
Gracias, tus comentarios siempre son estimulantes. Un bico.
Muy bueno, Maite.
Es un relato muy bien escrito, en el que manejas con naturalidad un tema otrora tabú y hoy aceptado, aunque por todos lados hay gente trabajando para volver al pasado.
Enhorabuena y suerte.
Bicos.
Pues te doy la razón sobre esa gente que intenta con empeño volver atrás. Gracias por leer y comentar, me alegro de que te haya gustado. Un bico.
Un relato que rompe tópicos y atraviesa barreras. Nos incita a la reflexión.
Besos apretados, Maite.
Gracias, Pilar, por leer y dejar tu comentario. Un beso.
Nos dejas un relato que nos recuerda que aún queda mucho por avanzar en materia de género y sexo.
Muy bueno, Maite.
Besos.
Gracias, Carmen. A veces pienso que todo va hacia atrás.Un beso.
Una apuesta interesante que ahonda en el tema de los roles de género dándole una vuelta insospechada ya que tradicionalmente son las mujeres las que ocultan su identidad. Me ha gustado mucho. Si me permites un comentario desde el respeto al trabajo que has hecho, creo que tal vez se repite demasiado el rosa y, aunque es el tema de la convocatoria, quizás podías haber dicho simplemente color fucsia, en la primera ocasión, y rosado (tal vez) en la segunda, reservando la expresión «color rosa» para la tercera frase, en la que resulta ineludible pues es el nombre del concurso. Pero repito, el relato me ha gustado mucho.
Suerte y abrazo.
Pues no sabes como te agradezco tus indicaciones, tienes toda la razón, corregiré el original y quedará mejor, muchísimas gracias, me encanta recibir estos comentarios de los que se aprende y se mejora. Otra vez gracias por leer y comentar. Un beso.
“Los aplausos espantaron al silencio” Y punto. Yo también aplaudo, a la autora y a lo que transmite.
Muchas gracias, me hace ilusión tus aplausos. Un beso.