Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

Single Blog Title

This is a single blog caption

58. EL EMPERADOR NO VEÍA EL TRAJE (La Marca Amarilla)

Mamá siempre iba a la moda, tan coqueta ella. Papá en cambio no lo reconocía, tan hombre como era, pero también cuidaba su aspecto, y dos pares de buenos trajes sí que tenía.

Algunas tardes, mi hermana y yo jugábamos a vestirnos y maquillarnos como ellos, y no parábamos de reírnos viendo nuestras transformaciones en desfiles improvisados. Papá reía menos, sobre todo cuando yo me ponía la ropa de mamá y me pintaba los labios; yo notaba el cabreo en su ceño e intentaba no vestirme de mujer, y mira que a mí me divertía. En cambio, cuando vestía su ropa y me pintaba un bigote, solía mirar orgulloso y alabar lo bien que aparentaba un señor con traje. Mamá y yo siempre creímos que mi hermana lucía mejor la ropa de papá y tenía más gracia al andar que yo, que parecía un pato con aquellos zapatones lustrosos. Mi padre también se asombraba cuando ella se mostraba terriblemente atractiva con sus corbatas y sonreía divertido, tan sólo comentaba que una señorita no debía ponerse pantalones.

Muchas veces recuerdo aquellas tardes cuando voy a visitar a mi hermana y su mujer.

8 Responses

  1. Ángel Saiz Mora

    Dice un refrán que «el hábito no hace al monje», cuando lo cierto es que la vestimenta es algo que nos define y dice mucho de una persona, al ser su segunda piel o, incluso, más que eso, una verdadera seña de identidad.
    A veces solo vemos lo que queremos ver, pero la naturaleza, como dicen en la primera película de la serie Parque Jurásico, «siempre se abre paso».
    Un relato sobre lo que se es y otros quieren que seamos, algo que puede coincidir o no.
    Un abrazo, Marca, ¡campeón¡ Suerte

    1. La Marca Amarilla

      Totalmente de acuerdo, Ángel!!! Como siempre, muy acertado!

      Gracias por comentar!! Es más ciego el que no quiere ver…

      Un saludo, campeón!! 😉

  2. Pedro F.

    Muy acertada aquella frase:
    «Tu madre és la que lleva los pantalones en casa.»
    ….y fuera!
    Me agustado el relato. Un abrazo amigo y ha seguir escribiendo.

Leave a Reply