22. GEPETTO (Paloma Casado)
Desde la cama mira con ternura al joven que dormita sentado en la silla. A pesar de sus defectos, adora a ese chico. Nunca fue fácil. Recuerda el día en que, a costa de todos sus ahorros, pudo sacarlo de la cárcel a donde lo habían conducido las malas compañías. O cuando consiguió liberarlo del vientre devastador de la droga que a punto estuvo de anular su conciencia. Sonríe al pensar en la psicóloga que, como un hada madrina, ha conseguido convertir en hombre al que antes fuera un títere de sus propios engaños. Lo ve desperezarse y levantarse despacio para decirle al oído:
-Parece que la quimio está dando buenos resultados, pronto volverás a casa.
Sabe que es su última mentira.
Mentira y Pinocho son sinónimos. En este buen relato, un enternecedor Pinocho dice una mentira piadosa. Esta vez no se merece que le crezca la nariz.
Triste, se descubre al final. Tan pendientes que estamos de las andanzas del chico y resulta que el protagonista es el sentenciado a muerte.
Es una penita, ahora que mejora se queda sin ¿padre?
Hola, Paloma. Lo que más me gusta de tu micro es que es una versión moderma del cuento de Pinocho y que está contado desde el punto de vista de Gepetto: Pinocho ha superado todas sus vicisitudes y ahora es un hombre joven que duerme en una silla de hospital mientras lo cuida a él. Le dice una mentira blanca («la quimio está dando resultados, volverás a casa»), pero Gepetto no se deja engañar; bien sabe él que es la última mentira que oirá (esto me recuerda al dicho, «Más sabe el zorro por viejo que por zorro»).
Un micro con un dejo de tristeza; aún así, me gustó.
Un beso,
Mariángeles
PD: Hace unos años, yo escribí un micro sobre Pinocho inspirada en una foto que saqué en un viaje a Florencia. Si querés leerlo, lo vas a encontrar, junto a otros micros, en este enlace que te dejo:
https://mariangelesabelli.blogspot.com/2021/10/lo-maximo-lo-pequeno-en-la-viii-feria.html?m=1