El planeta convertido en un carbón tras el más ardiente acto amoroso imaginable.
Seis palabras bastan para descubrir la última batalla que terminaría con todas las guerras y cuanto conocemos.
Suerte y un saludo
Me encanta, por fin alguien lo ve claro, ese sol generando vida, eyaculación diaria de rayos que preñan la tierra. Sin sol no hay vida. Claro que el título no pega con lo que acabo de contar. Ya sabes, María, que estos micros no sé apreciarlos. Un abrazo.
Certero disparo María. seguramente, aunque con suerte no lo veremos ninguno, esa última batalla será exactamente como tú la describes.
Buenísísimo.
Abrazos
¡ D i o s N o s P i l l e C o n f e s a d o s !
PORQUE LLEGARÁ.
Aunque, bien pensado, ninguno de quienes escribimos aquí, lo verá.
Besos Repletos de Protuberancias Solares.
Post Scriptum : Has creado los nanorrelatos de «Ultimátum»
Excelente.
Esto sí que es una explosión de palabras. Pocas que dicen mucho.
María, vaya idea. Has roto el tópico del sol y la luna… Suerte y saludos
Dentro de su brevedad es muy cañero.
Abrazos, María.
Será sin duda la última. Muy buena idea.
Un saludo
JM
El planeta convertido en un carbón tras el más ardiente acto amoroso imaginable.
Seis palabras bastan para descubrir la última batalla que terminaría con todas las guerras y cuanto conocemos.
Suerte y un saludo
jajaja—si, esa sería la última sin duda. Un acierto.
María, impactante, definitivo. Abrazos y suerte.
Pobre luna despechada su príncipe le ha salido rana.
Micro intenso. Concentrado en breves palabras y grandes actos.
Desde luego el fin del mundo parece divertido.
Buen mini, un beso Maria
A todos muchas gracias por comentar. Estos te animan a escribir.
Abrazos hirvientes.
Contundente donde los haya. A estas alturas seguro que ya sabes que los «minimicros» son mi debilidad.
Si, la tierra imitando ciegamente al sol.
Desde luego, después de esa batalla, ya no habrá más, al menos por aquí cerca, y eso si queda alguien para verla.
Suerte y saludos.
Edita, Isabel y Rafa.
Gracias por acercarse a estas líneas.
Felicidades
No se puede decir con menos. Esperemos que tarde en llegar. Y la Luna que no se marchite, que alguien encontrará. Mucha suerte 🙂
Lo siento pero no llego a coger este tipo de ¿¿twett??. No lo capto. Culpa mía. Sorry.
Juan Antonio y Manuel, gracias. Los relatos que no te llegan, ni modo.
Felicidades.
Me encanta, por fin alguien lo ve claro, ese sol generando vida, eyaculación diaria de rayos que preñan la tierra. Sin sol no hay vida. Claro que el título no pega con lo que acabo de contar. Ya sabes, María, que estos micros no sé apreciarlos. Un abrazo.
Certero disparo María. seguramente, aunque con suerte no lo veremos ninguno, esa última batalla será exactamente como tú la describes.
Buenísísimo.
Abrazos