Mnstrscp2018 – R1 – Encuentro10
Los participantes con los seudónimos : BOWIE- EILEEN GRAY – AGATHA CRISTIE
Esta ilustración NO entra en concurso.
Deberán escribir un relatazo digno de este concurso que se ajuste a estas bases
PLAZO : Antes del domingo día 16 de septiembre a las 24 horas peninsulares españolas
Relato que TRANSCURRA en : ABU SIMBEL
Deberá contener una de estas dos frases (o las dos, si os atrevéis)
a) No mires al techo ahora. Él odia que lo miren.
b) Cada vez que sonríes me estremezco: empieza la tortura
EXTENSIÓN máxima de 150 palabras (frasecita(s)) no incluida(s)
TODO LO DEMÁS: estilo, época histórica, temática etc es LIBRE
Votación a mejor ilustración de Arquitectura
¡Patata! de BOWIE
Cada vez que sonríes me estremezco: empieza la tortura. Como cada día, el sol golpea de plano mi rostro y, como cada vez que estoy a punto de levantar la mano para taparme los ojos, un misterioso destello me ciega. Y otro. Y otro más. Me recuerdan que debo permanecer quieto. Y sonreír como sonreís tú y los millones que son como tú.
Bueno, sonreír mejor no. Creo que te asustarías si me vieses curvar los labios a mí o a uno de mis tres gemelos. Sobre todo al que esta más a la derecha… Te suplico mentalmente que no mires al techo ahora.
Él odia que lo miren.
¿Patata? a ver… en la última entrega de premios ENTC quedo claro que la palabra mágica para hacerse las fotos es : CLITORIS, que allí estaba yo presente susurrando al oído del personal. Eso sí da suerte y sales guapetón en las fotos. Con «patata» no me extrañaría que los gigantes aplastasen a los turistas…
ESCAMADO de EILEEN GRAY
Mi esposo y yo compartimos una afición obsesiva: viajar. Aunque nos falta por conocer algún país importante, tenemos especial querencia por Egipto, a donde nos desplazamos con frecuencia. Incomprensiblemente, nos quedaba por visitar Abu Simbel. Por fin, este verano lo hemos conseguido; mas no fue cómo deseábamos: se nos acopló nuestra mejor amiga, recientemente viuda, a la que no pudimos decir que no. Ya en el interior del apoteósico templo de Ramsés II, perdimos de vista a mi marido, cosa que no me extrañó en absoluto, pero sí a ella. En vez de seguir disfrutando de la visita, tuve que dedicarme a controlarla:
-No mires al techo ahora. Él odia que lo miren.
Evidentemente, mi advertencia produjo el efecto contrario.
-¡Pero si en el techo solo hay un lagarto horroroso!
No respondí. Contemplé angustiada como el reptil se agazapaba detrás de un coloso de piedra y supe que aquella sería la última vez que vería a mi pareja.
La curiosidad casi lo mata de AGATHA CRISTIE
Cada vez que sonríe me estremezco, empieza la tortura de nuevo. En penumbra y boca abajo he perdido la noción del tiempo y la realidad. Me separé del grupo ensimismado en los relieves que me condujeron a un agujero. Cierro los ojos, no debo mirar al techo ahora. Él odia que lo miren y si me pilla observándole me volverá a mostrar sus dientes. Puedo escuchar a través de la rejilla a los turistas en el templo. Oigo sus voces distorsionadas. Quiero gritarles pero mi garganta está demasiado seca y asustada para emitir palabra.
Un estruendo salpica el lugar. Tan sólo el polvo cubre el aire que se hace insoportable. Los colosos caen, los muros se rompen y el silencio lo inunda todo. Las sombras que me apresaban se han perdido y puedo liberarme del miedo. Me levanto y salgo del escondite bajo las piedras.
En el exterior, las cuatro estatuas sentadas permanecen inmóviles mirando el cielo rosáceo que anuncia la noche sobre las aguas tranquilas del Nasser.
Estáis votados!!!
Ya está jojo jo
Listo y suerte.