Mnstrscp2019 – R5 (CuENTClasic)- E2
R5 – E2 : hasta luego, Lucas – clásicos de siempre y ganadores Entc del 2014
Los participantes con alias : ROBINSON CRUSOE – SASTRECILLO VALIENTE
con un recuerdo especial para los ganadores del 2014 : Paloma Casado y Asun Gárate
- deberán escribir un texto de 150 palabras máximo (titulo no incluido)
- antes del domingo 8 de diciembre a las 12 de la noche hora peninsular española
- que mezcle o conecte de la manera que sea (un personaje de un cuento se infiltra en el otro cuento, un personaje sufre vicisitudes propias del otro relato, o cambia de escenario o … hay una historia que conecta ambos relatos
- En una de estas dos opciones
- OPCIÓN A :
- Cuento clásico : Patito feo
- Cuento Entc 2014 : Mutantes
- Sugerencias : ¿qué mayor mutación que crecer, yo antes no tenía pelo ahí?, ¿no somos los humanos unos patitos feos que nunca llegaremos a convertirnos en los cisnes que deberíamos? y si los mutantes ya están aquí en forma de Gabrielito Trump?…
- OPCIÓN B :
- Cuento clásico : Blancanieves
- Cuento Entc 2014 : Despedida
- Sugerencias : Quizás la belleza y esperar a que llegue el príncipe no sirva de mucho y más vale ser prácticos, ¿cómo se supera pasar de ser la más bella del barrio a cargar tu sola con la familia cuando un marido te abandona?…
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Pato mutante de Robinson Crusoe
Me llaman “El cisne” por feo, pues todos saben de sobra que soy un pato. Mi grasiento plumaje me confiere un aspecto desagradable, y mis pies, extremadamente anchos, hacen de mi andar algo grotesco. De mi pico baste decir para entender sus burlas que, con su larga y aserrada forma, más que boca de ave parece hocico de reptil.
Aunque últimamente la atención general recae sobre otras cosas. Las temporadas de lluvias se fueron solapando entre ellas hasta hacer que el estanque invadiera las viviendas de los humanos. Luego aparecieron esos chicos, capaces de nadar y bucear como nutrias, convirtiéndose en nuestra mayor amenaza.
Mi vida cambió hace varios meses cuando uno de ellos atrapó a la bella Daisy. De un bocado arranqué un dedo al depredador, para acto seguido, tras escurrirme entre sus manos, llevármela velozmente.
Ayer tuvimos nuestro primer hijo. Ella dice, orgullosa, que es idéntico a mí.
Espejo de princesas del Sastrecillo valiente
Blancanieves recibe el beso del príncipe, tierno como los de su padre cuando la visitaba a escondidas. Un gemido angustiado escapa de su boca. Cada recuerdo del padre la hace revivir el día en que la reina la arrastró hasta las caballerizas para que lo viese —la desesperación en los ojos, la derrota en la lengua— colgado de una viga, balanceándose al compás de las carcajadas de la madrastra. —Míralo —le dijo—, así es como terminan los cobardes.
Abre los ojos.
—Vendréis a mi palacio, hermosa niña, os haré mi esposa.
Es guapo el príncipe, y bien proporcionado, pero tiene la expresión abúlica de quien nunca se enfrentó al esfuerzo y una mirada, que a ella le resulta familiar, donde la confianza en obtener sus caprichos se mezcla con la debilidad.
—Os agradezco, señor, haberme despertado: ya no soy niña, sino mujer. Como tal, yo misma elegiré mi destino.