Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

SCHADENFREUDE

Un relato con menos de 200 palabras inspirado en el tema que te proponemos

Bienvenid@s a ENTC 2024 Este año, la inspiración llega a través de conceptos curiosos de otras lenguas del mundo. El tema de esta tercera propuesta es el término alemán SCHADENFREUDE, que viene a significar la "alegría por el mal ajeno" Y recuerda que el criterio no debe ser poner menos palabras sino no poner palabras de más. Bienvenid@
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Esta convocatoria finalizará el próximo
15 de MAYO

Relatos

658. VOLVERME A VER, de Zorro estepario


Entré a buscar lo que no sabía que encontraría. Indagué entre las ramas, pregunté a las garzas y esperé respuesta de cada una de las arañas que me sostuvieron impacientes en su red. Caminé desnudo al apagón del día, cuando el sol se iba rutinario a descansar. Sentí armonía en el frío de lo oscuro. Y esperé abrazado a ti por ver si aparecías. Me rendí gritándole al río, y fue tu reflejo, y no el mío, el que me volvió a empujar a sentirme vivo. Metí la pata en cada cueva. Y te escuchaba, se notaba en cada una de ellas. Corrí sin seguir la senda, olvidé el camino pisado y me detuve frente a ti cuando estabas cerca. Entré al bosque a buscar. Y busqué en el bosque por tu paz. Es el brillo de la claridad entre las hojas, el ruido natural de lo que tocas. Te encontré, calma, te encontré. Ahora puedo volverme a ver.

657. TRAS EL REFLEJO, de Árbol 3

Se encontraron entre la maleza del bosque y se detuvieron. Durante unos instantes no supieron qué hacer, tal era la impresión que se habían causado. Ambos se creían solitarios caminantes, craso error. Se miraban en silencio, temiendo, cada uno a su manera, que en cualquier momento se quedasen solos y el encuentro muriese como un espejismo efímero. Árboles, maleza y la fauna que deambulaba con discreción contuvieron la respiración, temiendo que la belleza del momento, de la que ellos eran partícipes, quedase en nada. No fue así, pues ninguno de los dos hizo el amago de alejarse. No se habían visto en la vida, y sin embargo. Se acercaron y posaron sus manos en la cara del otro, acariciando con suavidad la mejilla del rostro hasta ese momento desconocido. No les extrañó lo inusual de esta intimidad, pues pronto comprendieron. Al fin, pronunciaron las primeras palabras.
                -¿Dónde has estado todo este tiempo?
-Buscándote.

656. OJO POR OJO, de Musgo 7

Le encantaba ver como el fuego crecía y crecía consumiendolo todo. Tan solo el chasquido de un mechero había bastado para provocar semejante incencio. El bosque se retorcía crugiendo de dolor en aquella macabra danza de gigantescas llamas. Pronto vendrán los vecinos y las patrullas de extinción alertadas por el humo – pensó mientras se disponía a abandonar el lugar en su todoterreno pero algo le impedía apartar la mirada de aquello. Así lo encontraron los primeros en llegar. El rostro del pirómano, hasta entonces de clara satisfacción, se vió alterado al descubrir que los lugareños vestían antiguos ropajes portando espadas lanzas y escudos. Mientras lo conducían maniatado, pudo oir como, en un castellano primitivo, hablaban de quemarlo esa noche en la plaza de la villa, junto con las condenadas por brujería

655. DESDE LA VENTANA, de Lobo 3

Papa, ¿porque hemos venido al bosque?
¿Ves esa casa de madera que esta junto al rio?, Allí nació tu padre…Desde esa ventana, he presenciado el ciclo de la vida.
Verás, en primavera, el dulce perfume de las flores, realza una harmoniosa melodía de canticos. Los colores fluyen de un lado a otro, te embaucan, te atrapan, solo quieres observar; La luz recorre sigilosamente cada hueco entre la hojas, el cortejo natural aflora el entorno; no dejo de mirar, es hermoso…
En verano, las noches se hacen cortas, el suelo busca engullir el agua de alguna nube, los atardeceres se hacen únicos. Es el momento de abrir la puerta, correr, y respirar.
Al llegar el otoño, los colores rojizos, anaranjados y amarillentos te sumergen en un entorno bucólico y nostálgico. Los campanos del ganado que descienden desde la alta montaña y el sonido de los ciervos en celo, recuerdan a los arboles, que deben dejar caer, hoja tras hoja.
Finalmente el invierno, agarra un gélido pincel, tiñendo el bosque de blanco. Los animales duermen, el silencio se apodera, el tiempo se para…Todos esperan.
Sabes hija!, desde esa ventana no miraba al bosque, era él, quien me miraba a mi…

654. ORUGA, de Jabalí 2

Érase que se era… en un lugar cualquiera… un ser, un minúsculo y casi inapreciable ser. Rugoso, áspero, desagradable… érase que se era… una común y vulgar oruga.
Era una oruga triste, sola, apesadumbrada… nadie quería jugar con ella, todos le llamaban fea. Desde que nació siempre fue así, pero un día, algo pasó. Como cada noche, la pequeña oruga se fue a dormir, triste, sola, oscura… pero esa noche soñó que era bella, que tenía amigos, que jugaba con los otros seres del bosque, soñó simplemente, que alguien normal era. Lo que ella no sabía, es que a veces los sueños se hacen realidad y a la mañana siguiente, cuando despertó, un olor distinto sintió. Era un perfume agradable, dulce, como a flores. Abrió los ojos lentamente y pudo comprobar que un caparazón la envolvía. Sintió su cuerpo extraño, ligero, suave y cuando encontró fuerzas para levantarse, se miró. Y cual fue su sorpresa al darse cuenta de que ya no era aquella rugosa, áspera y desagradable oruga, sino que ahora era un suave y tierno… berberecho!!!.
Moraleja: No importa quien seas, ni en que te conviertas, en el fondo sabes, que tú también eres, un berberecho. ¡Como todos!

653. ESPECTÁCULO HOBBIT, de Amanita

Pasen al Bosque! ¡La función dará comienzo en breves instantes!
La mujer araña se acomodó en su tela y su presa adormecida exhaló el último hálito de vida. 
El Puck de Shakespeare, el último superviviente del Pueblo de las Colinas, se sentó junto al pueblo del Puck creado por Kipling, rodeado por robles, fresnos y espinos. En las profundidades de los túneles, horadados por topos, escarabajos y grillos, se ocultaban los Goblins de Tolkien protegidos con sus zapatos de suelas de hierro. En las oquedades de los troncos se agazapaban los Harfoots de pies peludos, tan ligeros como las liebres, y cerca del río que serpentea el bosque, los corpulentos Stoors permanecían alerta, mientras el resto de los habitantes, los altos y delgados Fallohides, tomaban asiento.
¡ Con todos ustedes Gandalf, el hechicero blanco, el Merlín de los celtas, el Odín de los Normandos, El Mercurio de los romanos, el Hermes de los griegos, el gran Toth de los egipcios !.
Y Gandalf agitó su bastón blanco y el espectáculo de colores, luces, y movimientos sincronizados del Bosque dio comienzo.  Me senté junto a un elfo que me dijo: ¡el premio al mejor observador es un anillo!

652. UN BOSQUE DE SUEÑOS, de Amanita

El Bosque de los Sueños se hilvana con hilos de oro, tricotando el muérdago sobre la madreselva y pespunteando la hiedra en los troncos de tu fantasía. Se teje, igual que un poeta escribe un verso, se exhibe como  un trovador lo declama.  Se borda, igual que se funde un lienzo con tus pensamientos color violeta. Se disfruta, con la misma delicadeza que saboreas una obra de arte.
El Bosque de tus Sueños, se encuentra siguiendo el Sendero del Río de la vida.
Podrás detenerte en cualquier rincón para zurcir los melodiosos piares vespertinos, observarás el silencio cuando las hojas deambulen errantes en la soledad del crepúsculo. Dejarás tus huellas impregnadas con tus anhelos, cuando la nieve oculte el patchwork otoñal. No podrás recoser el nacimiento de los hijos del bosque, porque crocus, prímulas, margaritas y hongos,  se cobijan en los albores primaverales junto al roble, el acebo o el castaño.  Y cuando te acerques a él,   no olvides remendar a los elfos con su invisible fragilidad, que escondidos tras las briznas de hierba, te contarán sus secretos más íntimos,  y de cómo,  tus sueños, pueden enhebrarse en la paz de este Bosque.

651. EL LICÁNTROPO Y LA LUNA, de Jaguar

Un hombre languidece en su cuarto. Es noche de luna llena. La magia del bosque lo avasalla. Camina hacia él. Deambula entre los árboles sin rumbo fijo. La luz del astro se filtra entre las ramas. El influjo del antiguo hechizo le hace estremecer. Empieza a transformarse. Colmillos, músculos, olfato aguzado. Los ojos de un búho son testigos de la metamorfosis. Ahora es un licántropo. Depredador implacable. Duendes y gnomos huyen a su paso. Los espectros se agazapan detrás de los arbustos. Los animales se refugian en sus madrigueras. Observa a la luna aproximase al nadir. El licántropo corre jadeante a su encuentro. Sus espíritus se funden momentáneamente en uno solo. La amante extasiada se torna roja. Venus acecha a la distancia. Un rayo de plata golpea el corazón del licántropo. Es la venganza de quien se sabe desdeñada. Herido de muerte se arrastra hacia su amada. Sus lágrimas de dolor forman un espejo de agua. Hacia allí, desciende la afligida luna en
 su afán por consolarlo. El licántropo gime de melancolía al contemplarla por última vez. Ella le acaricia el lomo con su luz antes de volver al firmamento. Una sombra triste se apodera del bosque. Es un eclipse

650. ¡QUIERO INTIMIDAD!, de Golondrina 2

-Vamos que ya está bien ¿eh?. Todos los días lo mismo, así no hay quien duerma , esto se está volviendo insoportable, no se si es la edad, pero…
-Si es verdad, al principio era divertido, por lo peligroso, la velocidad, la adrenalina, los amigos , las piruetas pero todos los días lo mismooooo ¡ ya está bien..!
-Con todos los árboles que hay en el bosque , porque mira que hay ¿¿eh??  Si me dices que estamos en un parque , que solo hay unos pocos y cada vez menos y mas raquíticos, pero ¿aquí?.
_Si , mires por donde mires …. Es lo único que hay, árboles de todas las especies  tamaños, colores, formas, con pocas ramas, con muchas, si lo difícil sería elegir .
-¡Pues no! Tooodos los estorninos al mismo, aquí todos bien juntitos, volamos juntos, comemos juntos , dormimos juntos, y ya si te toca al lado alguien que ronca ….  apaga y vámonos.
–  ¡Ya está  bien! Yo quiero un poco de intimidad , quiero volar sin miedo a chocarme que hay cada loco que….
– Y lo bonito que hace en el cielo ¿eh?
-Si, eso si.
-Hasta mañana.
– hasta mañana .

649. MIEDO, de Golondrina 2

Era noche cerrada, tenía que atravesar el bosque y sin dudarlo se adentró en él . Al principio iba centrada en el camino, lo complicado era caminar sin tropezarse, cosa que resultaba bastante difícil ya que las raíces de los centenarios árboles asomaban a lo largo de todo el sendero que cada vez se hacia mas estrecho e intransitable .
 Las ramas empezaban a tocarla , primero suavemente y después enganchándose en sus ropas con lo que su atención se desvió hacia estas, que poco a poco fueron tomando formas horribles  con largos brazos que intentaban atraparla y enormes ojos que lanzaban terribles miradas sobre ella.
Los sonidos eran escalofriantes, y recorrían todo el bosque , como en una conversación infernal, creyó oír hasta su nombre ¡¡¡ANNNAAA!!!.
Ya  estaba aterrorizada, pero sabía que si se paraba sería peor así que sacó fuerzas de donde pudo y siguió adelante, sin mirar donde pisaba ni hacia donde se dirigía . Tenía que salir de allí antes de que la atrapase alguno de aquellos monstruos.
Sentía como se iban acercando y sin saber cómo, se encontró fuera del terrible peligro.
-¡Bien! Había pasado la prueba, entraría en la hermandad ….

648. LA LAGUNA DE LA NOVIA, de Conejo

Ella estaba sentada al margen de un río, cerca del canal de la novia. Sara vivía en aquella pequeña casa en lo alto de la montaña del Ciervo, en medio de un frondoso bosque. Había escogido un lugar tranquilo que le permitiera pensar y escribir sus novelas.
Aquel día el otoño se había hecho presente. Las hojas ya amarillas se desprendían de sus ramas y bajaban al suelo en un baile de pasos y giros interminables hasta que tocaban tierra. Luego seguían su ritmo en danzarines en el suelo. Las aguas del río, cada vez más frías, arrastraban las que se atrevían caer en su cauce.
No sabía, a ciencia cierta el nombre del río, pero sabía que la parte que se anchaba, un poco más abajo, era llamara, “La Laguna de la Novia”.
Contaban las leyendas locales que, en siglos pasados, una doncella, prometida a un apuesto joven, había sido vendida por su padrastro a un señor de la corte. Después de la boda, se había fugado de la fiesta, antes de consumar el matrimonio, se había tirado a la laguna. Y como su vestido tenía muchas faldas, no pudo nadar para salvarse y murió ahogada.

647. EL BOSQUE DE LA LAGUNA, de Conejo

Hoy he decidido dar un paseo por el Bosque de la Laguna. Mientras caminaba por entre sus majestuosos árboles, una sensación de paz abrazaba mi alma. El viento otoñal traía buenas noticias. Era cálido, acariciaba mi rostro y revoloteaba mis cabellos. Las ramas bailaban en una coreografía muda, siempre igual.
 Las hojas volaban de sus cunas para jugar con las demás. Observé que el suelo verde, hoy estaba vestido de marrón con muchos tonos. El cantar de los pájaros y el corretear de las ardillas. Todo ocurría en total harmonía.
 Me senté bajo un hermoso árbol, reclinado sobre el río. Sus hojas llegaban a tocar el agua cuando, al soplar el viento, sus ramas balanceaban de acá para allá.
Allí estuve pensando el lo solemne poder de la creación. Los detalles y mecanismo de sus engranajes. En fin su total perfección. No me percaté de que el tiempo pasaba y ya en la tarde, el sol reflejaba su luz en las aguas, dándoles un color amarillo dorado. Otra vez la sensación de alegría me invadió. Tal belleza fotografiada en mi memoria, los olores y sonidos grabados en mi mente. Era todo tan puro que podría decirse que es casi celestial.

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