83. Pasión de tinta y nicotina
«escribir es un acto complementario al placer de fumar»
Julio Ramón Ribeyro
Aprendí a fumar sobre el vientre de Nicole, sobre su niqui azul o su blusa estampada de azucenas, sobre su piel desnuda. El aliento de su voz jugueteaba con el humo que lloraban mis pulmones, enredados ambos en confidencias y presagios, en proyectos de futuro. Soñábamos a la sombra de un castillo abandonado con París o Nueva York, con locomotoras que arrastraban vagones de colores y mochilas atestadas de anhelos imposibles. Aprendí a escribir sobre su espalda de alabastro, protegidos del sol abrasivo del estío y de ojos indiscretos. Sobre sus nalgas traslúcidas tomaron cuerpo mis primeros versos, escritos con el ansia instalada en la yema de los dedos. Aquel verano fui feliz en el refugio de sus labios, asomado al paisaje de un mañana perenne junto a ella. No fue así, jamás respondió a mis cartas ni llamadas de teléfono ni volvió a aquel pueblo perdido a pasar las vacaciones. Nadie recuerda nada de ella, solo yo, algún atardecer, veo asomar su silueta en la bocanada de un Ducados o la intuyo en el impulso feraz que dicta mis poemas. A veces asoma su voz por las troneras, arriba del castillo, como el espectro abigarrado de la ausencia.
Un trío de grandes pasiones llena la vida de tu protagonista: una mujer, el tabaco y la escritura. Fue feliz cuando las tres confluyeron. Cuando una de las patas sobre las que se asentaba desapareció, le quedaron las otras dos, en una vida que siguió hacia adelante, pero nunca con el mismo equilibrio. Tabaco y alcohol sirven de desahogo pero no pueden suplir la ausencia, tan solo ser instrumentos de nostalgia de lo perdido.
Un relato que es la crónica de una tristeza, sin desdeñar la belleza que a veces también la acompaña, como bellas son las descripciones.
Un abrazo y suerte, Juancho
Muchas gracias Ángel por tu, igual que siempre, impecable comentario. Solo añadiría que tal vez el relato hable sobre el afán de alcanzar lo inalcanzable, sobre las oportunidades perdidas, sobre la búsqueda, el motor que impulsa nuestras vidas.
Un fuerte abrazo!!
La musa en estado puro. Belleza en estado puro. Suerte Juancho.
Muchísimas gracias Mar, creo que el relato podría tener varias lecturas y la tuya me parece de lo más interesante.
Un beso grande!!
Qué bonito, amigo.
Suerte con él.
Muchísimas gracias Yolanda!!!
Un beso grande!!
Juancho cuánto lirismo, si es que tienes tanto de poeta que sale por los poros. Un abrazo y suerte.
Muchas gracias Monte!! A veces me da algo de miedo excederme con el lirismo, pero hay cosas contra las que no se puede luchar.
Un fuerte abrazo!!
Cuando la nostalgia es creativa, surge la belleza. Un relato precioso. Un besuco y suerte a secas porque es estupendo.
Muchísimas gracias María José!!! Siempre es necesaria la suerte, más en ENTC, porque cada vez está el listón más alto.
Un besuco grande también para ti!!
Precioso, Juancho.
Un beso.
Carme.
Muchísimas gracias Carme!!!
Un beso grande!!!
Como siempre, riqueza léxica y elaboración esmerada. No sé si de nicotina, pero pasión de tinta, seguro. 😉
Muchas gracias Edita!!! Hace quince años que dejé el tabaco, y ha sido la mejor decisión que he tomado en estos últimos quince años, de la tinta sin embargo no consigo desengancharme.
Un beso enorme!!!
Me declaro Juamchista del séptimo día.
Independientemente de la historia, el arte de la narrativa vive de palabras hermosas y precisas, de frases hábilmente cpnstruidas y engranadas, de sensibilidad contenida, de intención manifiesta.
Y la historia, claro, la historia…
Enhorabuena, Juancho. Suerte!
Muchas gracias compañero!!! Yo también me declaro Salvadorista, y no solo por tu manera de escribir, sino también por tu excelente labor profesional y por ese talante optimista con el que siempre te presentas. Estando de acuerdo contigo, creo que si escribimos es para contar algo y es ahí donde siempre me asaltan las dudas, a la hora de saber si lo que estoy contando, la historia, puede resultar interesante a quien lo lea, más allá de la hermosura. Aunque también es verdad que siempre busco el ritmo en lo que escribo, sea poesía o narrativa, supongo que igual que hacemos todos.
Gracias de nuevo y un fuerte abrazo!!!
Ella era su inspiración. Eso la convierte en inolvidable.
Hermoso micro, Juancho. Mucha suerte.
Besos apretados.
Creo que el dolor que siente tu personaje es un precio que cualquiera estaría dispuesto a pagar por tener una experiencia como la suya. Una maravilla de narrativa la tuya siempre. Enhorabuena, Juancho, y mucha suerte. Un abrazo.
Muchas gracias Enrique!! En esta página tengo muchos modelos en los que fijarme…
Un abrazo enorme!!!
Perseguir metas, sean las que sean, mantiene viva la ilusión. Muchísimas gracias Pilar!!!! Un beso enorme!!