05. Horas extras
A pesar de estar fuera de la consulta, me quito los guantes y analizo por segunda vez esta preciosa mano. Quizá aquel día se me pasó algo. La línea del corazón mantiene los mismos rasgos pasionales. La del intelecto, curva, como hecha con un compás, de esas que no se olvidan. Soñadora con trazos de vulnerabilidad. Tendrás tres hijas, tres, le dije, y se llevó la mano izquierda al vientre. La línea del dinero se quiebra súbitamente. Aquello me lo callé, aunque le hice a la chica un descuento por la sesión. Fluye por la palma un largo surco de vida. Se lo señalé. ¿Está segura de eso?, me preguntó entonces aquella joven de mirada vidriosa. Claro que sí, cielo, respondí sin dudar.
Mientras sujetan su mano derecha con delicadeza, observo las mías; callosas, mentirosas también. Para acallarlas, me ajusto los guantes estirando el plástico azul y comparo durante unos segundos mi presente imperfecto con aquel futuro tan brillante como incorrecto que me predije. Quizá se me pasó algo. Y hablando de futuros, antes de que el doctor Flores regrese del baño, devuelvo la mano a la camilla y arrastro la fregona lejos de la sala de autopsias.
Qué maravilla! De principio a fin mantiene el interés, pero es que el final es redondo. Tuyo tenía que ser…
Un abrazo.
Puuuffff Asier, sensacional.
No es correcto violentar a una difunta, cuyos restos se han ganado el descanso; pero más incorrecto aún es engañar a los vivos con palabrería, con predicciones de futuro que quedan en absoluta evidencia, pero hasta que el fraude se desvela, le sirve a algunos para vivir a expensas de crédulos e ingenuos. Como los extremos, al final, se tocan, embaucadores y farsantes nunca están lejos.
Muy original, Asier,
Un abrazo y suerte
Muchas gracias, Yolanda, Pablo y Ángel por vuestros comentarios. Sois muy generosos.
Ostras, Asier, es intenso tu micro, y como ya te he han dicho atrapa de principio a fin. Enhorabuena.
Un abrazo y suerte.
Todo en su sitio, maestro. Saludos.
Menos mi comentario que se lo he puesto a Rosalía, claro.
En este relato todo es incorrecto menos el relato, que es estupendo. Muy bien.
Muchas gracias, Rosalía y Edita. Intenso e incorrecto, me gusta 😉
Dos partes bien diferencias en tu relato.
Menuda lianta! Aunque no me queda claro que
la pitonisa fuera consciente de sus patrañas. Dudas pero luego se pregunta si se le había pasado algo.
En todo caso un relato que tiene distintas lectoras. Conseguido!