Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

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Mnstrscp2018 – fin R2 : entrevista al escultor

Cerramos la segunda ronda del Monstruoscopio con una participación de 52/60 y un montón de buenos relatos, todos nos han dejado una sonrisa en la boca. Gracias.

Esperamos que os esté gustando el concurso, aunque hoy tenemos que despedir a algunos participantes porque de los 60 inscritos solo pasarán 45 a la ronda3.

 

 

Mientras esperamos resultados y las bases de R3 (mañana a media tarde) os contamos que MºCarmen Marí se ha alzado como la MonstruAstuta de esta ronda al haber acertado (vale solo ha participado ella) las dos preguntas sobre la escultura, pero las ha acertado.

 

 

Y seguimos con nuestras entrevistas de ultratumba

hemos conjurado a Bernini, Buonarroti, Rodín, Cánova, Camile Claudel, Luisa Roldán, Louise Bourgeois

para que opinen sobre esta escultura comunmente llamada «la patata» y que está en Amorebieta (en mi tierra, Euskadi). ¿Qué simboliza? ¿Lugar ideal para ubicarla?

BUONARROTi – INVASIÓN

Llegaron diciendo que venían en son de paz y nos dieron regalos: la cura del cáncer, o un nuevo «abrefácil» que abría fácilmente las cajas de leche, entre otros nuevos inventos. Pero a cambio tuvimos que pagar un precio muy alto. Uno de cada tres niños de la Tierra tenía que convertirse en un artista de super vanguardia. A mí me toco. Tuve que montar la escultura que diseñó mi hijo —y a la que tituló «Odio el brócoli»— en el centro de Vallecas. Y, a pesar de las miradas asesinas de los vecinos, no pude negarme. De haberme opuesto me habrían llevado a su nave nodriza. Dicen que allí suenan las canciones de Enrique Iglesias día y noche… y otras cosas peores. Un cabecilla de la Resistencia pasó tres meses encerrado. Regresó con vida, pero ahora se pasa el día bailando regetón. No hay esperanza para la raza humana.

 

 

LUISA ROLDAN – Bolo alimenticio

Veo esa escultura y se me pone la carne de gallina; me ha ocurrido desde siempre, me es imposible mantenerme impasible ante ella. Y a la vez siento envidia de su autor, de su genialidad, porque… me gustaría haberla hecho yo. Es una obra de arte que habla de esa época que hemos vivido todos los artistas en la que has de hacer de todo para sobrevivir, mientras el hambre te duele en las extrañas y tienes miedo de no llegar a ser quien quieres. Eso es esa escultura: el hambre llenándote el estómago y los pinchazos de la desazón. Lo siento, no puedo mirarla sin ponerme profunda y sin que se me humedezcan los ojos. ¿Qué si sé de quién es? No tengo la más mínima idea, me supongo que de un perroflauta cualquiera.

 

CÁNOVA 

Tras la invasión mundial de los mal llamados “caminantes”, se colocaron en diferentes plazas y lugares emblemáticos estatuas que homenajeaban a los héroes que nos salvaron de desaparecer y a sus primitivas y efectivas armas de combate. En ese sentido la “Bola de los pinchos” ha sido y será un emblema de esos combates y un gran recuerdo de lo que se produjo, a nivel creativo y mortal, en esa época donde la vida dependía de tu habilidad para esquivar un bocado. Por eso, existen representaciones en miniaturas de esta figura en las cocinas y comedores de nuestras casas. Como recordatorio de lo que esperemos que no vuelva a suceder, aunque todo el mundo conoce que el gobierno los sigue protegiendo en los campos de cura de los “caminantes”, donde siguen experimentando con ellos, en busca de su retorno a seres vivos. ¿Lo lograrán o volveremos a ponermos en peligro?

 

CAMILLE CLAUDEL

No entiendo el arte moderno. Lo siento, pero no puedo con él. Que alguien me explique qué significa esta tortuga gigante sin cabeza. Vale, vale. Olvide el exabrupto. Tenga en cuenta que estar muerta agria el carácter a cualquiera. Borre lo anterior y grabe a partir de ahora. Creo que esta estatua simboliza el triunfo de la naturaleza sobre el hombre español. Una aceituna gigante, ensartada por palillos en los cuatros costados, se mantiene en pie con la apostura propia de un torero. ¿Qué dónde la pondría? Pues… en las peores pesadillas de los políticos… No, corte, corte. Ponga que he respondido que la pondría en el aeropuerto de Madrid, para que todos los visitantes extranjeros fueran empapándose de cultura española ni bien llegar. ¿Me daría un ibuprofeno antes de volver a la tumba? Gracias. Es que se lo decía. No puedo con el arte moderno. Me produce horribles jaquecas.

 

Louise Bourgeois

Todas las ciudades tienen su tradición gastronómica. Además de los platos de cuchara y los sabrosos segundos, ir de pinchos se ha convertido en una tradición. Allá donde fueras come lo que vieras. Hay Gildas de encurtidos; costas variadas y, en esta plaza, patatas asadas. Somos los mejores asadores de toda la comarca, es el pincho estrella en nuestras barras, así que entre todos pagamos a escote la estatua.

 

BERNINI – Plaza Mayor

Después de largas y acaloradas deliberaciones, el alcalde, con un sonoro puñetazo sobre la mesa de reuniones, determinó que la escultura se ubicaría en la última rotonda del pueblo, la que facilitaba el acceso a la autovía que les conectaba con la capital, y dio por concluido el pleno haciendo valer su voto de calidad. Aquella tarde el primer edil salió de casa de Florita con las orejas gachas y sin conseguir los favores de costumbre. De nada sirvió explicarle, de una y mil maneras, como la oposición quería confinar su Fiesta Nacional en las cocheras del servicio de recogida de basuras y como, algunos de sus concejales, propusieron fundirla y confeccionar clips con los que abastecer las dependencias del Ayuntamiento durante los años venideros. Cansado y solo, se dirigió al Oasis, y se sintió más cercano que nunca al trípode, pues así era como le llamaban en el pueblo.

 

Os animamos a sentiros escultores y opinar, sobre la «obra» y las opiniones de los maestros, ¿Cual os gusta más?

 

7 Responses

  1. Eva García

    A mi me han gustado todos, menos mal que no les has hecho despertarse como ‘eso’ Melísima, que luego se tienen pesadillas 🙂 ¡Ya con el de Buonarroti me entró la risa! Besos.

  2. Patricia Mejías

    Mi favorito es BUONARROTi – INVASIÓN, La escultura parece el corazón arrancado de un espantapájaros. Incluso se pueden ver las arterias coronarias.

  3. Me han gustado todos, pero me ha costado seguir el hilo de algunos, y las faltas de ortografía, siempre me atragantan un buen relato. Lo siento.
    Sea como sea, mi favorito es el de Bernini. Creo que el personaje del alcalde está muy bien perfilado.

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